Un año más, siempre un año más.

Bueno, pues resulta que va y se termina el año 10… pues nada, otro año más a la bolsa, si, a la bolsa de la vida y no a la de basura. Ya que yo soy de los que piensa que todo año que pasa es siempre para sumar. Puede que, por los hechos, este año pueda parecer, en algunos momentos, una pesadilla, y puede que a corto plazo, eso, sea verdad, pero en el mercado de valores de la vida real, al igual que en el ficticio y financiero, las inversiones, en este caso, de tiempo vital, hay que hacerlas a largo plazo para que sean realmente rentables.

Así que si llega el momento de hacer balance de este año que acaba, tengo que decir que ha habido, como en botica, un poco de todo, cosas muy buenas, cosas buenas y cosas no tan buenas, pero al final, de todo he aprendido, o mejor dicho, estoy aprendiendo, como se suele decir, el día que crees que lo sabes todo, te das cuenta de que realmente, no sabes nada. 🙂

Sólo desear que, para todos los que leéis este blog, por pocos que seáis, paséis un feliz final de año y un año 2011 todavía mejor que el 2010, que si, que puede que haya sido algo malo, pero bueno, que se le va a hacer, llegará el día en el que miremos hacia atrás y algo bueno podamos sacar de este año que acaba, que seguro que lo hay.

Entre mis deseos para el año que viene simplemente que cada uno de vosotros encuentre al menos algo de lo que busca y si lo que busca es felicidad, que la encuentre seguro, sólo hay que salir a buscarla y, a veces, aparece en los lugares más insospechados, pero no desistáis en vuestra búsqueda, es de las pocas cosas que merecen la pena realmente en la vida.

Un saludo, y mis mejores deseos para el año próximo a todos vosotros.

P.D.: Intentaré escribir más a menudo que últimamente.

Pues eso, mucha suerte

Hoy es el día de la salud, al menos eso dicen muchos, y yo, la verdad, no puedo decir lo mismo, yo he tenido mucha suerte. Y voy a explicar mis razones para decir esto.
Primero, siempre he pensado que jugar a la lotería no es buscar la suerte, si no más bien llamarla, y claro, cuando llamas a alguien, es posible que no conteste, así que no te quejas, forma parte del juego.
Por otro lado, no me fio de los momentos puntuales, las ocasiones afortunadas difícilmente solucionan tu vida, creo más en el esfuerzo personal y en el trabajo.
Por eso digo que me siento afortunado, porque este año he consolidado amistades nuevas, mis amigos se encuentran a mi lado cuando les he necesitado y para colmo, encontré trabajo y disfruto de buena salud.
Pues eso mucha suerte he tenido este año, ¿y vosotros?